Monday, February 21, 2011

¿Por qué no me caen bien los Hipsters?


Espero no ganarme demasiados enemigos con este post. Eso de ir contra una subcultura luego atrae críticas y hiere sensibilidades. La cosa está así: en los últimos meses, en unas cuantas pláticas de sobremesa y carretera, he llegado a una elaboración estructurada de "¿por qué me caen mal los hipsters?". No es nada personal, el que se sienta aludido puede estar seguro que no hablo de él. Este es un ensayo genérico y sin ánimos de ofender a nadie.
Definir a un hipster es complicado. El término es original de los 40's en Estados Unidos, y hacía referencia desde entonces a una subcultura que gustaba de ir contra las modas. En aquel tiempo eran fanáticos mayoritariamente de jazz. Hoy son fanáticos mayoritariamente del Arcade Fire (Que, por cierto, a mi me gusta, aunque de manera más mesurada). Más allá de definiciones formales todos tenemos muy claro el principio fundamental del hipster: ir contra la moda. Son una especie de anti-trendies. Claro que ellos mismos son trendies (son una moda, pues), por lo que a la mayoría de los hipsters no les gusta aceptarse como tales.
De hecho, en el sentido "anti-trendie" yo podría decirme parte de ellos. La diferencia es que yo no repudio el fenómeno de una moda, sino el contenido temático de la mayoría de las modas. Es decir, no me molesta que algo se haga moda, me molesta que Lady Gaga se haga moda. El hecho es que eso no es (tanto) lo que me molesta de esta tendencia hipster de los últimos años.
La cosa con el hipster es lo pretencioso que llega a ser. Por poner un ejemplo claro: una postpuberta a la que le gustaban los Backstreet Boys, podía tener un mal gusto, pero no pensaba que su percepción fuera universal y determinante; no consideraba esta música como una arte elevada. El hipster en cambio es determinista, además de ser profundo conocedor del arte y las percepciones humanas (seh...). Lo que a él le gusta es universalmente artístico, y en ello están los cimientos sobre los que se va a construir el arte durante los próximos 5 siglos. Y si alguien opina distinto, simplemente es un retrograda o no tiene ideas claras sobre el arte.
Una migo lo definió en un término interesantísimo: lo que me molesta de los hipsters es que son "arties". Un fresa amante de Camila entiende su fanatismo como una moda y no va por el mundo predicando la universalidad y potencial permanencia de Camila. Un hipster es capaz de llegar a pensar que la música que le gusta llegó para quedarse y para cambiar las mentes de la gente.
No voy a abundar sobre mi concepción de "lo que es, y lo que no es arte". Si tienen el interés, pregúntenme y nos echamos un café (ustedes disparan). Lo que sí puedo decir es que para mi la música hipster no es más que otra moda que vino para dejar algunos elementos, y se perderá entre alguna nueva oleada de trendies. Y entonces los hipsters tal vez vean que simplemente fueron parte de lo que tanto les choca: un fenómeno del mainstream.